
Los economistas están rebajando sus previsiones de crecimiento económico para China nuevamente, por debajo de un nivel considerado necesario para que el Partido Comunista cumpla sus propios objetivos a tiempo para el centenario del 2021.
Oxford Economics, Bank of America Merrill Lynch, y Bloomberg Economics redujeron sus pronósticos para el crecimiento del producto bruto interno en el 2020 a menos del 6% como resultado de los crecientes riesgos de la guerra arancelaria con Estados Unidos. Asimismo, Helen Qiao de Bank of America y otros economistas advierten que el actual enfoque del Gobierno hacia los estímulos está resultando insuficientes.
China se está absteniendo de recortar las tasas de interés o de inyectar grandes volúmenes de efectivo a la economía, pese a la desaceleración del crecimiento al nivel más débil en casi treinta años, y el aumento de los aranceles en agosto supone más vientos en contra. Ello podría impedir que el presidente de China, Xi Jinping, afirme que el país ha alcanzado una “sociedad moderadamente próspera” que habrá duplicado el PIB de 2010 para el próximo año, ya que se necesitaría una tasa por encima del 6% en el 2019 y 2020.